FITOTERAPIA (Terminología que proviene del griego phyton (planta) therapia (curar))
Es la terapia natural que estudia las plantas medicinales y su aplicación. La fitoterapia se utiliza mucho en la medicina integrativa para prevenir, mejorar o curar tanto enfermedades como enfermedades o desequilibrios emocionales. La capacidad terapéutica de las plantas medicinales se encuentra en la actividad farmacológica de las moléculas que fabrica, que son los principios activos.
Desde la antigüedad, el hombre ha obtenido remedios para aliviar dolencias y proporcionar bienestar mediante las plantas medicinales. Ya en la prehistoria, las utilizaba para curar heridas (cataplasmas de plantas y barro) y resolver enfermedades. Sin ningún conocimiento médico, las usaba de manera instintiva. Posteriormente, con la evolución, el uso de las plantas medicinales se hizo más extensivo y popular: los hombres se encargaban de cultivarlas y las mujeres eran las encargadas de elaborar el remedio.
La fitoterapia tal como la conocemos actualmente se desarrolló alrededor del siglo XX. Fue Leclere quien utilizó este nombre para designar la rama de la medicina que utilizaba las plantas como medicamento.
En la actualidad, la fitoterapia se ha llegado a considerar parte integrante de la medicina convencional, y la podemos encontrar como enseñanza en varias universidades y en la fabricación de fitofármacos.
Las plantas no presentan las mismas virtudes ni las mismas propiedades. Todo depende de cómo han sido tratadas y transformadas. Las cápsulas, las infusiones o los jarabes de una misma planta tienen propiedades e indicaciones diferentes.
La fitoterapia ha aprovechado los avances tecnológicos y los laboratorios han buscado la manera más adecuada, estable y eficaz de optimizar la acción de cada planta. Por regla general, las dosificaciones más exactos se obtienen con los aceites esenciales, polvo (cápsulas), tinturas o extracto. La posología debe adaptarse minuciosamente a la eventual toxicidad de la planta.
Los beneficios de la fitoterapia son muchos y variados. En la actualidad, hay más de mil plantas registradas en la farmacopea europea, es decir, son plantas que tienen una actividad farmacológica reconocida. Se utilizan para resolver muchos trastornos, desequilibrios y dolencias, ya sea como prevención o como restauración de la salud y para tener un bienestar general. Tienen un amplio campo de acción.
Sin tratarse de plantas medicinales, es necesario que el consumo esté supervisado por un profesional, ya que no todo lo natural es inocuo. En algunos casos puede haber una interacción o contraindicación.
